El turismo rural regresa al principio,es lo que percibo en la mayoría de los clientes que vienen a mi casa desde hace ya algún tiempo, gente joven que busca lo genuino , que busca lo que leyeron y lo que les contaron un día sus abuelos sobre los diferentes pueblos de la España rural , lo que han visto en la televisión sobre las cocinas tradicionales que de norte a sur de este pais se han ido perdiendo, cuando el progreso económico las relevó por aquellas minimalistas de gran plato, poco condumio y generosa factura, gente que busca los espacios naturales abiertos bosques, montañas, viñas, campos de cereal... o las piedras de esos en otra época florecientes monasterios y fortalezas poco conservados pero llenos de historia, de esa historia que ahora que el dinero escasea queremos recordar, algunos con nostalgia y otros con curiosidad y sobre todo con ganas de aprender como vivieron nuestros ancestros y que tal vez sea una opción de vida nada desdeñable para muchas personas que reniegan de las grandes ciudades, de su estres, del alto indice de paro o de la comida basura.
Volvemos al principio después de faustas inauguraciones de establecimientos pseudorurales, que a veces eran mas apropiados para estar en medio de Disneyland o de Port Aventura como ejemplo de lo que fue
el medio rural. Volvemos a la gastronomía tradicional del pueblo, a los platos de cuchara , a las brasas, a los fogones donde se hacen los guisos con tiempo y con mimo y a las materias primas cultivadas en las tierras aledañas que conservan el sabor que algún día creímos perdido para siempre.Volvemos a la calidez de las mantas de lana, al fuego de la chimenea que deja ese olor característico en nuestra ropa y sobre todo a la convivencia con las personas que te rodean, con los dueños del establecimiento rural que has elegido y que te trataran como a un buen amigo explicándote las rutas que puedes realizar, lo mas característico de la zona done te encuentras y otras historias que te seran de mucha utilidad, tambien con los compañeros de viaje con los que compartes alojamiento y conversaciones al lado del fuego con buen licor casero o simplemente con un cafecito.
Y todo esto son experiencias actuales de un pasado reciente que tal vez este pidiendo paso de nuevo.
A si que creo que el el turismo rural de experiencias regresa al principio o para que todos nos entendamos volvemos al pueblo para disfrutar de lo que perdimos cuando pensamos como nuevos ricos y despreciamos nuestros orígenes.
