
El sol está cambiando, el paisaje va adquiriendo tonalidades amarillentas, el ambiente es mas melancólico, parece que la plenitud del verano está a punto de desaparecer dejando paso a la calma otoñal, sin duda puede que en muchos lugares españoles sera así pero no aquí en La Rioja donde todos los signos citados anteriormente preludian una intensa actividad llena de tradición, de sudores, de vaticinios, de fracasos y de recompensas LA VENDIMIA.
Los colores rojizos y ocres de nuestras viñas son indicadores de la inminente recogida de los preciados racimos de tempranillo, garnacha, graciano... que se convertirán en mosto y tras unos tradicionales procesos naturales ayudados de la sabiduría del enólogo ese mosto dará lugar a uno de los mejores vinos del mundo, motor de la economía riojana y orgullo de todos nosotros.
Si no conoces la vendimia esta es la tierra adecuada para vivirla y disfrutarla y si te gusta el mundo del vino no lo dudes este es su templo.